Basketgol
Hoy he descubierto un nuevo deporte: el basketgol.
Están montando, por primera vez, una sección de baloncesto en el club deportivo de mi pueblo adoptivo, tradicionalmente futbolero de pro. Ésa es una buena noticia, las cosas van cambiando al fin y el baloncesto empieza a tener su hueco.
Sin embargo, hoy he pasado por allí cerca y me he pensado que no, que a esa hora tocaba baloncesto, pero nadie entrenaba baloncesto. De más cerca he comprobado que no era exactamente así. Un grupo de niños y otro más tulllidito, que sería el entrenador, echaban una pachanga a toda pista.
Hasta ahí todo normal. Sin embargo, en esa pista no había canasta alguna. Sí estaban, en cambio, las tradicionales porterías de balonmano y fútbol sala (antes conocido como futbito). Pero de canastas, ni rastro. Bueno sí, fuera de las pistas estaban arrinconadas un par de canastas destartaladas, las mismicas que ya estaban ahí, en esa misma posición, cuando uno, hace ya más de 15 años, tiempo en el que todavía no había descubierto el baloncesto, aún jugaba en los juveniles de fútbol de dicho club.
Resulta que los chicos jugaban a baloncesto: botaban, pasaban, defendían... pero no tiraban, porque no había a donde tirar. Por un momento pensé que habían inventado el basketgol, es decir, jugar al baloncesto pero introduciendo el balón en la portería en lugar de en la canasta. Pero no. Parece ser que unas marcas en el suelo hacían las veces de canasta.
En mi pueblo hemos inventado un nuevo deporte: el Basketgol
No tengo claro que sea intencional este tipo de entrenamiento. Hace muchos años que hice el curso de monitor, y casi tantos el de entrenador, pero no recuerdo haber visto esa modalidad de entrenamiento sin canastas. Tal vez hasta está pensado para que los chicos se concentren en el pase, en la distribución en la pista, en ocupar espacios y no distraerse con la golosina de chupar para tirar a canasta.
Pero algo me da que no, que, en realidad, no se usaban las canastas porque están tan destartaladas que les da miedo moverlas por si se caen a trozos, o simplemente porque sólo disponen de una hora de entrenamiento y, como es natural, antes y después se requieren los servicios de dicha pista deportiva para su tradicional empleo para el fútbol sala, donde las canastas, tan difíciles de mover, no son más que un estorbo.
Es decir, como siempre, el fútbol decide sobre casi todo. En este caso, el fútbol decide que el equipo de mi pueblo, al llegar a la competición oficial, esté condenado a tener el peor porcentaje de tiro del mundo mundial. Eso cuando no le de a alguno de los chicos por lanzar el balón contra la portería en lugar de hacia la canasta. Uno hace en los partidos lo que aprende en los entrenamientos ¿no?.
Pues eso, ¡viva el basketgol!.
Están montando, por primera vez, una sección de baloncesto en el club deportivo de mi pueblo adoptivo, tradicionalmente futbolero de pro. Ésa es una buena noticia, las cosas van cambiando al fin y el baloncesto empieza a tener su hueco.
Sin embargo, hoy he pasado por allí cerca y me he pensado que no, que a esa hora tocaba baloncesto, pero nadie entrenaba baloncesto. De más cerca he comprobado que no era exactamente así. Un grupo de niños y otro más tulllidito, que sería el entrenador, echaban una pachanga a toda pista.
Hasta ahí todo normal. Sin embargo, en esa pista no había canasta alguna. Sí estaban, en cambio, las tradicionales porterías de balonmano y fútbol sala (antes conocido como futbito). Pero de canastas, ni rastro. Bueno sí, fuera de las pistas estaban arrinconadas un par de canastas destartaladas, las mismicas que ya estaban ahí, en esa misma posición, cuando uno, hace ya más de 15 años, tiempo en el que todavía no había descubierto el baloncesto, aún jugaba en los juveniles de fútbol de dicho club.
Resulta que los chicos jugaban a baloncesto: botaban, pasaban, defendían... pero no tiraban, porque no había a donde tirar. Por un momento pensé que habían inventado el basketgol, es decir, jugar al baloncesto pero introduciendo el balón en la portería en lugar de en la canasta. Pero no. Parece ser que unas marcas en el suelo hacían las veces de canasta.
No tengo claro que sea intencional este tipo de entrenamiento. Hace muchos años que hice el curso de monitor, y casi tantos el de entrenador, pero no recuerdo haber visto esa modalidad de entrenamiento sin canastas. Tal vez hasta está pensado para que los chicos se concentren en el pase, en la distribución en la pista, en ocupar espacios y no distraerse con la golosina de chupar para tirar a canasta.
Pero algo me da que no, que, en realidad, no se usaban las canastas porque están tan destartaladas que les da miedo moverlas por si se caen a trozos, o simplemente porque sólo disponen de una hora de entrenamiento y, como es natural, antes y después se requieren los servicios de dicha pista deportiva para su tradicional empleo para el fútbol sala, donde las canastas, tan difíciles de mover, no son más que un estorbo.
Es decir, como siempre, el fútbol decide sobre casi todo. En este caso, el fútbol decide que el equipo de mi pueblo, al llegar a la competición oficial, esté condenado a tener el peor porcentaje de tiro del mundo mundial. Eso cuando no le de a alguno de los chicos por lanzar el balón contra la portería en lugar de hacia la canasta. Uno hace en los partidos lo que aprende en los entrenamientos ¿no?.
Pues eso, ¡viva el basketgol!.
Comentarios
Ya hay canastas. Son blancas, reglamentarias y ¡¡hasta tienen red!!. Bueno, en realidad antes también las había, pero estaban fuera de las pistas, como hace 15 años, las mismas que compraron al inaugurar el polideportivo. Pero costaba tanto ponerlas, por lo pesadas, oxidadas y estropeadas, que nunca se ponían.
Lo de la red parece de risa, pero es algo muy especial el sentir cómo el balón se cuela por ella limpiamente, el ruidito ése de la canasta limpia "sssuppp". Además, el balón volvía hacia atrás y era más fácil hacerse las sesiones de 200 tiros, sin tener que correr tras la pelota cada vez que entraba limpia y se iba tras la canasta, al campo de fútbol de enfrente.
Pienso pasarme un día de éstos, a ver que tal van progresando ésos fundamentos, sobre todo el tiro, que será el que menos hayan practicado los chavales.
Salu2