La noticia de que la F1 se queda en Valencia sale justo unas horas después de que los Carabantes se queden con el CB Murcia
Qué casualidad que apenas horas después de que los Carabantes se hagan con el CB Murcia se hace pública la noticia, que publicaba hoy Dioni García en La Opinión, según la cual finalmente la F1 se quedará en Valencia y Murcia se tendrá que conformar con unas fábricas de motores como premio de consolación. Poca cosa esa de la fábrica como para regalar el CB Murcia a Carabante. Tal vez por eso, casualidad también, esta semana saltaron los teléfonos el lunes en busca de un Plan B para sacar el baloncesto, casualmente cuando debieron enterarse los políticos de lo que ya había manifestado hace un tiempo Adrián Campos, y que hoy publicaba La Opinión: Murcia no tendrá F1. Casualmente el mismo jueves en que se debía presentar al fin todo en rueda de prensa se tuvo que aplazar hasta ver finalmente quién llevaba el equipo, poniendo la burda excusa del vuelo perdido. Qué casualidades tiene la vida. Y qué sorpresas. La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida. Si naciste para martillo